(asteriscos* remiten a “razones efemerísticas”)
Cuando era chinorri
rogué a las ánimas del purgatorio
que, si tenían bien, me revelaran el día de mi muerte. Una voz espesa, desde el
fondo del váter, respondió a mi súplica: ¡¡el
dos de mayo!! Seguramente el día anterior había estudiado la “guerra del francés”. Desde entonces le tengo respeto reverencial a esa fecha. Cuando un dos de
mayo tuve que presentarme en Cartagena para conseguir la exención definitiva de la mili, conduciendo un dos caballos recién estrenado, desde
Castelldefels, creí morir, de verdad. Las curvas de Garraf me parecieron las
cornisas del Purgatorio, desde donde las ánimas
me incitaban a acelerar haciendo caso
omiso al trazado de la calzada. Tras
horas de lucha contra Lucifer alcancé la meta… y todo se resolvió de la forma
que ya conocen vds.
Así que hoy, aunque en espíritu esté en Moscú o donde se
tercie, en realidad estaré estirado en el sofá, evitando daños y echando de menos al perro muerto, que ayer hubiera
cumplido 16 años… ¡Y la budionvska!
En la primavera del año 1921 Isadora recibió el siguiente
telegrama del Gobierno de los Soviets: “El
Gobierno ruso es el único que puede comprenderla. Venga a nosotros. Haremos su escuela”.
Isadora respondió: ”Sí,
iré a Rusia y enseñaré a vuestro niños, sin ninguna condición, salvo la que me
proporcionéis un estudio y el dinero preciso para mi trabajo”.
Se encontraba en Londres. Antes de emprender el viaje
consultó a una hechicera, como jugando: “Sale
usted para u largo viaje. Le sucederán cosas muy raras. Tendrá usted dolores y
se casará.”.
Isadora se rió a mandíbula batiente. ELLA, que siempre
había despreciado el matrimonio, ¿casarse?. ELLA… que había sido amante de los
ricos de la tierra y siempre había esquivado el “grumo”… ¿casarse?
–“Espere y
verá”.
…¡y vio!
Tal día como hoy, del año 1922 se casó con el “poeta campesino” Essenin. No pudo
defenderse contra los labios eslavos y el cabello de arcángel del poeta. Se juntaron el hambre y las ganas de comer.
Essenin se había hecho un nombre en Leningrado y gozaba
de su reputación en Moscú. Cerraba los bares
de la Tvérskaia y, una vez cerrados, escribía versos en las paredes:
“Amigo
mío, amigo mío, estoy muy enfermo.
No
sé de dónde me viene el dolor.
O
es el viento que silba
sobre
el campo desierto y sin nadie
o
como el bosque en septiembre
inunda
los sesos el alcohol”
Era un Rimbaud
venido de las estepas…y se convirtió en el rey de todas las sotas de la baraja.
Una elegancia inestable. Su inusitada camisa de seda era un mapa de los
rincones más canallas de Moscú. De cada local un indicio. Pistola al cinto.
Abotargado y, sin embargo, coqueto (¿). Insomne. Recitaba versos y recogía la
misma atención que los esforzados cantantes de karaoke:
“Me
encantan los poetas:
es
gente entretenida.
Siempre
se les ocurre una historia de sobra sabida:
igual
que un espantajo melenudo, a una escolar granujienta,
hablan
del universo rebosando gana carnal”.
Recibió la
Revolución con los brazos abiertos, desde el eserismo de izquierdas. Intentó repartir su alma (¿) entre el
campesinado y las fuerzas proletarias…dejando un buen trozo para acoger al “Espirituoso santo”. “Me siento bolchevique”…y escita. Los grandes simbolistas lo
consideraban su igual y su futuro. Los acmeístas…¡no
tanto! Maiakovski (¡pese a todo!) aún menos.
Poco a poco fue
derivando hacia un “misticismo” que
hacía peligrar su condición de perfecto “compañero
de viaje”. Trotski hará la valoración ajustada…¡¡Volveremos!!
La expansión del
Suprematismo-Constructivismo: su defensa de los “urbano” e industrial; su alejamiento de la “aldea” como ámbito de sensibilidad “superado”; su reducción del mundo a líneas y planos generatrices…agotó
el poco aire que le quedaba y el mundo se le hizo inhabitable. Tal día como
hoy, del año 1924, Malevich daba a conocer otro nuevo (¡¡) manifiesto “Suprematista”: donde establecía las
bases para su salto a la arquitectura. Algunos años más y la “aldea” y los campesinos que las
poblaban, desaparecerán, no ya sólo como
“Idea”, como algo “superado” dialécticamente, sino como
materia carnal…Pasando a convertirse en “almas
muertas” de la Historia. Tampoco Malevich y compañía gozarán de buena
salud: Stalin.
Deambulo por la inacabable, desigual y, en general, poco acogedora Tvérskaia (antigua Gorky) Me entretengo practicando mi ruso. Pregunto por cualquier calle. Doy los buenos mediosdías a los transeúntes…o pregunto por un bar de los de siempre.
–El
“siempre” ya hace tiempo que se acabó, camarada. Ahora es el AHORA. Si quiere
vd. un bar de ahora, métase en cualquiera.
–Gracias,
querido desengañado.
Entro en un
local amplio y limpio…por la zona agorafóbica
que se extiende entre el metro Puschkin
y Tvérskaia. En el local se bebe, se
come y se pasa el rato. Suena Big Crosby (*)
“Brother,
can you spare
a dime?”…¡¡
Salgo como catapultado!!
–Skaghite,
paghaluista…Gde rynok?
–Sí
hombre, sí! El mercado más grande no está lejos: “Rischki Rynok”–
me coge el mapa y me lo muestra: Prospekt Mira– Tiene un paseíto, pero con este hermoso tiempo será una delicia.
Llego echando el bofe. Me acodo en una barra y pido un
plato de pepinillos, ahumados y empanadillas. Y una botella de vodka.
Recuerden, sin embargo, que estoy tan ricamente en el sofá de mi casa,
ahuyentando los demonios y tomándome una cervecita fría.
Suena (¿cómo
imaginarlo?) el aria “Non la vuoi” de Scarlatti (*)…
–Afitsiant!
…¡Da cappo!
–Veo que vd. ,
desconocido turista, ha captado el espíritu de la casa. Suena Scarlatti para
que los clientes pidan exactamente lo que vd. ha pedido: otra ronda… ¡desde el principio! ¡¡Da cappo!!
Pues eso, que Essenin se casó con Isadora. Para el poeta
fue una rutina (más mujeres que Enrique VIII, entre ellas una Tolstoi) para
ella una absoluta novedad imprevista. Para ambos… ¡un desastre!
“Yo había buscado la felicidad e
esta mujer / e inesperadamente encontré mi pérdida / Yo no sabía que el amor era una enfermedad contagiosa
/ Yo no sabía que el amor era la peste”…Pues, chico…¡si no lo sabías tú!
París, Usa…
“¿Qué decirle a Usted -escribe
Esenin- sobre este horrible reino de mezquindad, rayana en el
idiotismo. Descontado el fox-trot no hay nada aquí que valga la pena. Todos
beben y se atragantan y de nuevo fox-trot. Aún no encontré un hombre de verdad
y no tengo idea de dónde se lo podrá encontrar. En los dominios del Señor Dólar
el arte verdadero no cuenta, el producto más acabado es el music-hall.”
“Cada vez me
es más entrañable la sociedad socialista. Es cierto que no me identifico con
los comunistas y que como el romántico de mis poemas apenas los siento próximos
de corazón, pero espero algún día identificarme con las tareas que se proponen.”
Además
el bardo no estaba dotado del “don de lenguas” y el papel de segundo no le iba…etc…etc.
Volvió
a los seis meses y se instaló por la parte del Cáucaso… ¡Escita!
Desde
el momento en que volvió a Moscú estuvo pensando en la solución definitiva al
problema principal de la existencia… (¡pero esa es otra historia… a la que volveremos!).
Un
perro sale de detrás de la barra y huele mis pantalones y, en ellos, algún resto del difunto. Los lame y parece que llore su ausencia y el
desastre de no haberlo conocido.
“¿Y tú, querido,
fiel perro pinto?
De viejo te has vuelto chillón y cegato.
Deambulas por el patio arrastrando el rabo caído,
y tu olfato no distingue la
calle de la cuadra.
¡Cómo añoro nuestras barrabasadas,
cuando robábamos a mi madre un mendrugo
y lo comíamos turnando los bocados
sin sentir asco el uno del otro.
Yo soy el mismo.
Mi corazón es el mismo.
Como acianos en el centeno, florecen los ojos en la cara.
Tendiendo las esteras doradas de mis versos
me dan ganas de deciros frases tiernas”.
Moscú respiraba el futurismo de Maiakovsky. Los tranvías lucían frases ingeniosas sobre imágenes desconcertantes de Rodchenko incitando a consumir ciertos productos. Los muros resplandecían con colores sacados de la infancia: La NEP. Bábichev se dispone a fabricar salchichas de primera para las masas proletarias. Y el proletariado, fortalecido por tan deseada proteína, se lanza a la construcción de un nuevo mundo. Y en el intento también él querrá transformarse.
Quizás (quizás) les faltara un poco de mostaza dulce de Baviera.
Tal día como hoy, del año 1919,
los “Freikorps” de Noske, habiendo
traspasado Dachau el 30 de abril entran en el centro de Munich, poniendo fin al
intento de relanzar la “república
soviética”. Comenzó el “terror blanco”.
La historia tiene un aire de familia. El fin empezó el 21 de febrero con el asesinado de Eisner.
Landauer fue inmediatamente
detenido y conducido a la prisión de Stadelheim, no para detenerlo en espera de
juicio… ¡no!... ¡para patearle la cabeza, abrirle los interiores, mearse sobre
su cadáver…! Y arrojar sus despojos a la lavandería.
El soldado que mató a Landauer "cumplía órdenes": fue declarado
inocente.
El oficial que golpeó a Landauer fue multado
con 500 marcos.
Otro oficial estuvo cinco semanas arrestado,
pero no por asesinar a Landauer, sino por robarle el reloj.
El oficial en jefe jamás fue llevado a
juicio.
Todos los participantes tuvieron una bonita
historia que contar a sus nietos durante las muchas noches frías de la
posguerra alemana…Gritaba como un conejo, el muy cabrón, hasta que se calló. Su
carne no se distinguía de su ropa, era todo una masa amorfa…¡así que lo
lanzamos a la lavadería!...JA JA JA
JA…¡Venga, Helmuncito, tomate el vaso de leche y a la cama…mañana más!
“Un ebrio repartidor de cerveza fue puesto sobre la mesa.
Alguien
había colocado entre sus dientes
un
aster claro-oscuro y violáceo.
Cuando,
con un corte subcutáneo
extirpé
desde su pecho
con un
cuchillo de filo largo
la
lengua y el paladar
debo
haber rozado la flor, pues ésta se deslizó
hacia
el cerebro que yacía junto a él.
Lo
instalé entre virutas
en la
cavidad del tórax
mientras
lo cosíamos.
¡Bebe
hasta el hartazgo en tu florero!
¡Descansa
en paz
pequeño
áster!”
Este era el tono de los grandes poetas alemanes
(G. Benn, nacido tal día como hoy, del año 1886))…¡Ni una palabra de duelo para
el repartidor de cerveza! ¡Descansa en paz, pequeño áster!
–все очень хорошо
–Me
alegro de que le gusten mis mercancías. A cambio le daré un consejo: “Huya usted de las palabras
volubles y vacilantes y, más que todo, ocúpese de las acentuaciones justas”
–Es decir que si quiero salchicha diga
“salchicha” y no me vaya por el reino de las metáforas.Y sobre todo, que no
diga “sálchicha”… ¿He entendido?
–Perfectamente. Y, ahora, elévelo al reino
de lo universal.
–Spasiba!
No
me iré de Moscú sin visitar el Parlamento y recordar in situ al malasombra
de Yeltsin que, tal día como hoy, del 92, le dio por hacerse nombrar jefe del
ejército. ¡Sabía lo que se hacía! Ahí, en esa mole blanca se desvanecieron
euridicianamente las últimas esperanzas (¿) de no sé qué. Borracho guarro;
grosero; pringoso; oleaginoso; churretoso; chabacano; patán; descortés; zafio;
palurdo; zambombo; rocín; gaznápiro; criminal; pagado; vendido… ¡Vergüenza de
los bebedores! ¡Descrédito de los borrachos!...
Quiso
disimular desapareciendo un 23 de abril.
Frente
a la mole y dando la espalda al hotel Moskva (¡el de la Stolichnaya!): ¡¡Por
lo que no pudo ser!!
De momento el día va pasando sin percances. Y lo que son las cosas, lo que es la fuerza del espíritu…¡ha aparecido junto al sofá una botella de vodka cristalina! Me aparejo un bocadillo de Camembert con “caviar” de Mújol del Mar Menor y entre trago y trago que circule este fatídico día.
Bien
podrían venir de fuera y llevarse a la casa real en pleno. “Los alcaldes de
Móstoles” (*) lo agradecerían. Un dos de mayo (1808) declararon la
guerra a Francia y un dos de mayo (1985) firmaron la tan necesaria paz. Con la
firma del tratado desapareció el principal obstáculo para la exportación de las riquísimas empanadillas. Este comercio
se incrementó notablemente tras la entrada en escena de las “Supremas de
Alcorcón” y “Las terremoto de Móstoles” que, al alimón, empujaron en
la dirección adecuada el carro del progreso.
El
dos de mayo del año 1492, por Real cédula (Reyes Católicos = Rayos Catódicos)
se fundó oficialmente “San Sebastián de los Reyes”. Se les puso como
condición que no cayeran en la fácil tentación de fabricar empanadillas. El
mercado es amplio y variado, escojan Vds. otra cosa a la que dedicar sus
energías. El acta la firmó, en nombre de los Reyes, Juan Zapata, secretario.
Y
miren vds. por dónde, tal día como hoy, en Pinos del Valle, bajan (al barrio
bajo) el Santo Cristo del Zapato. Dado su origen italiano es muy
prinmirado en eso del calzado. Al Cristo lo arropan san Sebastián (¡¡) y san
Roque, patrón de mi pueblo…¡el del perro!
Metidos
en harina, dejamos pasar la fundación del PSOE (cervecería Labra), la muerte de
Leonardo de Vinci y el encierro de Nanterre… ¡Hay muchos dos de mayo!
En
Caravaca (hermanada con Cabeza de Buey), estarán celebrando sus “caballos
del vino”. Cualquier oportunidad es buena para empinar el codo. Y para acabar…recuerden Vds. que tal día como
hoy, del año 1958, descubrieron en Sevilla ocho mataderos ilegales de carne
ganado caballar (¿)…y no sé cuantas fábricas de embutidos. En la época de Carpanta
y de Protasio… ¡hablar de mataderos ilegales!
…¡Y
pensar que me alimenté de carne de caballo!...
Bueeeeno,
el día toca a su fin…ileso...¡Iluso!…¡aún te queda Engelbert Humperdink! (*)
…Bona
nit…