(Asteriscos (*) remiten a efemerísticas
razones)
-1-
No, si algún día… con tanta rutina y palimpsesto, vamos a acabar mal: El otro día me traje a casa un
perro que confundí con Hegel; caí en
el error cuando me enseñó los dientes como último recurso. Hoy lo he olvidado a
la puerta del Condis: He salido del antro y me he dirigido a casa, como
siempre; he pellizcado la barra de pan y he lanzado el currusco al vacío
pensando que Hegel la atraparía… pero
Hegel seguía atado al árbol mirando
al infinito, por donde había desaparecido mi destartalada figura y quijotesca… como un bateau ivre* en busca de su isla de la Desesperación*… ¡Qué hermosa coincidencia efemerística!
Lean lo que tengo escrito sobre la primera lectura de “le bateau ivre”:
-2-
“No puedo imaginar el
mundo sin la interjección de Poe: “Ah, beat in mind this garden was enchanted!”
o sin el “Bateau ivre” o el
Ancient Mariner, pero me sé capaz de imaginarlo sin el Quijote”. Así se expresaba Menard, poeta simbolista de Nîmes y amante de la
lógica, el ajedrez, la metafísica, así como de la métrica poética, en carta a
“Borges” (desde Bayona) y con fecha de 30
de septiembre del año 1934. También declaraba que se proponía llevar a cabo
algo meramente asombroso: un verdadero
palimpsesto, por así decir, de El Quijote,
su principal obra visible.
Tampoco es que sea tan asombroso…
Yo mismo hago cada día un palimpsesto del día anterior. Y como testimonio
pueden Vds. acudir a las cámaras de vigilancia del Condis. Las condiciones nos
fuerzan a la repetición anacrónica de lo hecho, de tal manera que, como Menard,
puedo decir que mi vida adopta un estilo arcaizante que, cada día que pasa, se
hace más arcaico. Y así como Menard enriqueció mediante una técnica nueva el arte detenido y rudimento de la lectura, yo,
mediante ese anacronismo deliberado
(y forzado) y las atribuciones erróneas,
añado niveles interpretativos al simple decurso de la vida.
Menard sólo llegó a completar, influido
por Novalis, Daudet (y una tendencia plebeya a lo anacrónico) y devoto de
Poe…que engendró a Mallarmé, que engendró a Valéry, que engentró a Edmond Teste,
el cap. 9 y el 38 de la primera parte y un fragmento del 22. No le hizo falta
más para pasar a la historia de la literatura.
En realidad no es exactamente un palimpsesto: es una reescritura en toda regla, para la cual, el
autor, recreó las circunstancias por las que pasó el mismo Cervantes. El
resultado es un juego literario delicioso,
inteligente, irónico, que coincide, letra por letra, con el original y se convierte en el definitivo (de momento)… En fin, Borges
en estado puro. Y eso sin entrar en semiologías ni otras (infinitas) interpretaciones.
-3-
La noche anterior, James (Byron) Dean, desesperado con causa (infórmense Vds., infórmense), dejó su gato
en casa de la gata (sobre el tejado de
zinc). Días antes se había presentado, ¡de negro!, en casa de sus amigos…
como si tuviera intención de despedirse. Todos esos días estuvieron trufados de
detalles que después serían interpretados como presagios. Amaneció el 30 de
septiembre… Bueno, ya saben Vds. lo que pasó. De camino a Salinas…autopista
466… dirección oeste, acercándose al Edén… etc… multa de tráfico… un Ford…
algunos heridos y un muerto.
Así nació el mito… y el Pop. Eran las 5’30 de la
tarde del día 30 de septiembre del año 1955. Meses antes se había estrenado
“Semillas de maldad” que había puesto el reloj
a cero.
Hacía 13 días (¡13!) que se había empezado a emitir, en las salas
de cine y en la televisión pública, un anuncio de utilidad pública en el que,
con un estilo desenfadado, recomendaba prudencia en la carretera. El porsche
plateado, y tuneado a su gusto, lucía un “130”
en los cuatro costados. Los restos del vehículo fueron robados y nadie sabe,
pese a la recompensa, su paradero.
Tentado estoy a acabar de destrozar mi plateado Ford K y
presentarlo como candidato… ¡un millón de dólares!
Parece que esta muerte abrió la puerta a la desgracia colectiva.
Tengo para mí que fue un homenaje gore y por todo lo alto, gigantesco
(por así decir), a la fundación, exactamente 44 años antes, de la industria de
Holliwood (Natalie) y del Gaumont Palace de la
parisina Place Clichy, al mismo tiempo que en el teatro Fémina de París se
estrenaba la adaptación teatral de Impresiones
de África, de R. R., eremita de
la escritura : El peculiar pasaje (tanto como las obras visibles de Menard) del Lyncée
naufraga en el reino de Talú VII, en las costas africanas…y tal y más cual.
Justo el mismo día (algunos años más
tarde) en que Robinson empieza su
diario con la mención de su naufragio.
Añadir leyenda |
Si han leído Vds. la “novela”, recordarán la tibia sonora (y la flauta de Tamino*) Pues bien, dice el
autor que se inspiró en el anuncio de una grabadora llamada Phonotypia, instrumento pionero de la
ofimática. Felice Bauer, a punto de caer en las redes pegajosas de K., era, en
aquellos días, especialista en el uso de tal artefacto, tan parecido a una
chirivía, rico tubérculo al cual la 1º República Francesa dedicó el día de hoy,
9 de vendimiario.
-4-
Tal día como hoy del año 420, moría en Belén, Jerónimo de
Estridón, eremita y santo patrón de los traductores… ¿y de los palimpsestistas? De este santo padre me
gusta lo del león. Lo de la Vulgata,
y demás, es una vulgaridad en comparación con esta escena que lo pone al
costado de san Roque, de san Francisco y otros grandes animalistas.
Se encontraba Jerónimo meditando a orillas del Jordán, cerca de mar
Muerto. No vamos a discutir si estaba en la parte jordana, en la israelita o en
la Cisjordania. Supongo que no sería lejos de Belén, su residencia. Sé que era
verano y que el santo padre aguantaba, pues era de su agrado, los 42º a la
sombra de una retama y que meditaba sobre los inconvenientes de vivir en la
zona más baja de la tierra… ¡muy por debajo del nivel del mar! Era normal,
pues, que estuviera deprimido, como lo estaba.
Un maullido como de gato, seguido de un quejido quedo, suspendió la
meditación del santo. Volvió la cabeza y vio un enorme león, pues entonces toda
la tierra era tierra de leones, que le mostraba la almohadilla de su pata
derecha atravesada por una enorme astilla de endrino. El santo lo curó y el
animal respondió con una fidelidad sólo comparable con la del perro de Mozart (o el de la última zarina).
¿Qué importa que sea o no verdad?
-5-
Tal día como hoy, del año 1791, Mozart no se encontraba bien, de
hecho estaba muriéndose; y, además, andaba mosqueado con lo del Réquiem. A pesar de todo, dirigió la
primera representación pública de La
Flauta Mágica. Fue un éxito discreto.
Fue su canto de cisne: Un canto alborozado al amor, la amistad, el
placer y la fraternidad. ¡Que otros disciernan sobre sus recónditos
significados!