Me despierto así:
”Ojos
claros, serenos,
Si de un
dulce mirar sois alabados
¿Por qué
si mi miráis, miráis airados?
Si cuanto
más piadosos,
Más
bellos parecéis a aquel que os mira.
No me miréis
con ira,
Porque no
parezcáis menos hermosos.
Ay
tormentos rabiosos!
Ojos
claros, serenos
Ya que
así me miráis, miradme al menos!”
El perro me lame amoroso y aplaude con el rabo contra el armario. ¡Hasta me trae la buidonovka!
Me he despertado madrigalesco...Pues eso que me ha
brotado en duermevela es un madrigal: composición de estrofa libre, normalmente
compuesta con versos de 7 y 11 sílabas con rimas consonantes repartidas un poco
al albur. Temática delicadamente amorosa, ecos bucólicos y un final,
normalmente revelador y sorpresivo.
Procede del “dolce stil nuovo” y se expande por toda Italia y Europa. Hermanado con la música desde el principio. Muchos se componían expresamente para ser musicados: a varias voces (a capella o con instrumentos) o bien para ser cantados por un melancólico enamorado acompañándose del laúd. Responden y desarrollan lo que Boecio llamaba “Música humana”, frente a la “divina” (o algo parecido). Expresión de afectos, que la música refuerza. Estuvo muy de moda en el XVI y ¡Sigue estándolo!
¿Puede alguien imaginarse a un madrigalista loco, asesino y masoquista? ¡Poder se puede! Pero no me negarán vds. que no cuesta imaginarlo. ¡Cantarle a la amada esas delicias mientras la despedazas!...Como un Baudelaire avant la lettre.
¡Dos lonchas! (con cortisona) por ser tan
perspicaz...Y pedir la budionovka para ti y para tu amiga. Un fifti-fifti y,
como tengo el cuerpo madrigalesco, haremos una pequeña excursión a ver pinos y hierbas...y si encontramos
algún espárrago, pues ¡miel sobre hojuelas! No olvidar unas cervecitas.
Pan y aceite...etc.etc...y fifti-fifti (¿o lo he
tomado ya?).
Más ligeros
de ropa ¡pero con la gorra! Ford K del 96 y ¡Carretera!
Tal día como hoy del año 1566, nació en Venosa: Gesualdo.
(¿ven vds.? ¡Venosa!): sobrino de arzobispo y de San Carlos Borromeo; sobrino
nieto de papa (Pío IV) y único heredero, por muerte (¿) de su hermano mayor, de
toda la herencia, incluyendo el principado de Venosa. Con tal linaje la puerta
del asesinato está expedita. ¡Y la exculpación! : ültimo sacramento para esos
elegidos.
Acostados debajo de un pino, arrullados (bueno, el
perro está sordo) por los indecisos trinos primaverales de los pajaritos recién
nacidos, me interno en esta deliciosa historia.
Gesualdo se casa con su bella prima (licencia
papal ¡sin problemas!) María de Ávalos, hija del duque de Pescara. Se instalan
en Nápoles. María le es infiel. Y él, con artimañas, los descubre. Ayudado de
sus sirvientes, que hacen el trabajo inicial ( descerrajar a tiros antiguos
(entre tiro y tiro...cargar el mosquetón...etc..etc..) la cabeza del amante y
atravesar a espadazos el hermoso cuerpo de la prima) y dejan al madrigalista la
labor de descuartización, del ensañamiento, de vaciar los cuerpos (al grito de
“aún no ha muerto! ¡aún no ha muerto!”) y exponerlos a la curiosidad (mucha)
pública.
La limpieza de los restos volverá a ser cosa de los sirvientes.
La limpieza de los restos volverá a ser cosa de los sirvientes.
La nobleza era (¿) inmune a la persecución ordinaria...¡Pero no a la venganza! Huyó a su castillo infranqueable de Venosa y esperó a que amainara el temporal. Se dice (¿) que mató también a su suegro que iba a por él. Y hay quienes, incluso, afirman que ahogó a uno de su hijos por que no le encontró el suficiente parecido.
A pesar de lo acaecido, su tío (y el resto de su
santa familia) favoreció su matrimonio con Eleanora de Este, hija del duque de
Ferrara. La cosa no funcionó: Gesualdo le fue infiel y (hay quien dice) que
Eleonora tuvo que ver en la muerte del madrigalista.
“Quien a
hierro mata..”.
Mientras tanto del madrigalista iba surgiendo una
música inaudita, dirigida sólo a su
turbia conciencia: Llena de disonancias y cromatismos, apartándose de la
tendencia general de la época hacia la formalización de la tonalidad (moderna).
No era suficiente con la expresión de la mala
conciencia. Y pasó a la acción: Primero le pide a su pariente el Cardenal
Borromeo reliquias de su tío santo. Como ni siquiera así consigue expulsar a
los demonios, pasa a las flagelaciones, que le inflingían muchachos elegidos (esto
lo cuenta Campanella). En septiembre de 1613 se lo encontraron muerto y desnudo
y con el cuerpo en carne viva.
Los demonios rondaban por el aposento.
Los demonios rondaban por el aposento.
¿Qué les parece?
“Incluso
en la agonía, todavía suspiro
¿Todavía
vives, oh despiadado corazón?
Ah, desde
que no hay esperanza
De ver de
nuevo a nuestro amado
La
muerte, nos da auxilio.
¡Toma
esta vida!
No me
atormentes, pero con un solo golpe
Terminan
nuestra vida y desgracia”..................................( a cinco voces)
¿Ven vds. en qué puede convertirse un madrigal?
Sus flagelaciones completaban sus últimas y
piadosas composiciones: “Tenebrae Responsoria”: Escuchen vds. aquello de. “Pedro, ¿Por qué me has abandonado?”
“...Tuvo
razón, se obstina Roberto, entonces y ahora es lo mismo, su mujer lo engañaba y
él la mató, un tango más, Paolita. Tu grilla de macho, dice Paola, los tangos,
claro, pero ahora hay mujeres que también componen tangos y ya no se canta
siempre la misma cosa” (Cortázal.
“Clone” en “Queremos tanto a Glenda”).
Sobre este cuento, con música de Antonio Zimermann
y libreto de Alejandro Tantanian se ha compuesto una ópera de cámara para viola
de gamba y bandoleón.
Franz Hummel, Alfred Schnittke, Salvatore
Sciarrino y Marc-Antoine Albavie…
…También! ...Novelas…biografías.
…También! ...Novelas…biografías.
Huxley (“Las
puestras de la percepción”) le dedica unos párrafos.
Schönberg admiraba su música: como una premonicion
de la liberación de la tonalidad (¡!)
Stravinsky : “Esto es cromatismo y no las torpezas de ese torpe de Wagner” y compuso “Pro-Gesualdo”.
Péter Eötvös...Anna Calvi y otros...lo reconoce
como su influencia más importante.
Brett Dean : “Carlo”
para orquesta de cuerda, cinta magnética y sampler.
W. Herzog: “Death for five voices” (¡Tal para cual!)
Joe Coleman: le hace un retrato imaginario.
Bertolucci está pensando realizar un “biopic” sobre su persona…¡ a ver si le
da tiempo!.
Una pasión tan compleja, desordenada y
desenfrenada, necesitaba nuevas formas expresivas y no dudó en utilizarlas. No
dudó en forzar la norma para dibujar sobre el pentagrama el crimen y su
corolario: la conciencia desdichada.
“Gorrión”
se ha dormido como un ángel. Señalo al perro y es una definición ostensiva de “lo racional”. Lo nuestro son restos
atávicos... hacia la conformación de pasiones desconocidas. Una Moritz y
vuelta...tras esta hermosa mañana campestre. Espárragos ¡ni uno!